Por fin acaba de salir mi última novela, Gran Bar Distopía, publicada por Ediciones de la Torre, una editorial madrileña de larga y comprometida trayectoria. Su editor, José María Gutiérrez de la Torre, apostó por mí al editar en 1989 mi primer texto narrativo, El sentido de las cosas, cuya segunda edición, revisada, saldrá de inmediato, también.

En este blog iré colocando apostillas a Gran Bar Distopía, muchas de ellas en respuesta a las preguntas o cuestiones que mis lectores deseen plantear.

De momento diré que he disfrutado mucho escribiéndola. Creo que he conseguido aunar reflexión y humor en iguales dosis, utilizando para ello materiales y lenguajes diversos al estilo de, por ejemplo, Sal, o El mirofajo o las reglas del juego.

Gran Bar Distopía es, ante todo, una novela. En ella pasan cosas, muchas cosas, y está protagonizada por un personaje para mí entrañable y sorprendente llamado Abel Manso Manso. Su nombre lo dice todo. Pero, además, debo decir que el argumento está nutrido por el tema central: la inminencia del Apocalipsis.

Mi conclusión es que el mundo, al borde del precipicio, está abocado a organizarse en dos facciones: los partidarios de la mochila PERK frente a los que defienden la mochila SBOB. Sí, es así, no desvarío. Por eso la novela arranca con una explicación de este dilema.

Mañana ingresaré en este espacio el capítulo de presentación de Gran Bar Distopía.